Una mirada a África como tablero de la geopolítica internacional

sábado, 5 de diciembre de 2009

GRACIAS, AMINETU


Alguien metió la pata con Aminetu Haidar. ¿Quién? Difícil, decirlo porque esto ha sido como el descosido que asoma en el calcetín, generalmente a la altura de la punta de la uña del dedo gordo, y que sin intervención rápida de una acción de zurcido, acaba con la viabilidad de la prenda siendo tan culpables de la hecatombe el primer desgarro como la falta de inacción con aguja e hilo.

El descosido comenzó con Mohamed VI que una mañana se levantó sobrao. Estaba próximo el infausto aniversario de la invasión con la que su padre se apoderó del Sáhara en noviembre de 1975, y estaba eufórico. Es lo que hace la soberbia con los que se sienten todopoderosos, cuasi semidioses y a ver quién supera la tentación de no andar por la vida por encima del bien y del mal cuando ostenta el pomposo título de Príncipe de los Creyentes, lo decide todo en su reino porque tiene poderes absolutos de rey feudal y, en el extranjero, tiene bula para saltarse las normas que todos los demás estados deben respetar, porque quienes deberían reprenderle no lo hacen y, encima, le ríen la gracia. Está muy estudiado el mal que causa la permisividad con las conductas malhechoras y, tras muchos años de gozar de impunidad total, Mohamed tenía nuevos motivos para que se le disparase el voraz “yo puedo más” que acaba devorando a los consentidos en exceso.

“Esto del Sáhara ya es cosa hecha. Lo tengo todo a capón para lograr lo que mi padre, con todo lo astuto que dicen todos que fue, no consiguió, que el Sáhara sea mío de verdad, con derecho de compra y venta sobre sus riquezas. Zapatero está a punto de presidir la Unión Europea y con ello tendremos a Moratinos a los mandos, él que es tan amigo mío, que casi parece más francés que español. Sarkozy ha despistado a todo el mundo para seguir haciendo una política gaullista en África, haciendo como que él es otra cosa y, lo más importante, tiene alineado con él, a Angela Merkel. Zapatero hará lo que ellos dispongan porque, como mínimo, hará lo que diga Moratinos que viene a ser lo mismo. Como dice Sarkozy, Zapatero no cuenta porque es tonto y, además, si ahora se le ocurriese tener ideas propias sobre el Sáhara y rebelarse a Moratinos como ha hecho con la ministra de Cultura (se llama ¿Sinde?), allí estarán preparados a intervenir Francia y Alemania con un buen capón”.

En sus estancias reales de cualquiera de sus palacios (en cada ciudad marroquí tiene uno), la esencia de jazmín se le iba subiendo a la cabeza a medida que seguía ahondando en esta composición de lugar de alta geopolítica. “Es que es perfecto: Zapatero está con la soga al cuello con esa crisis que no existía (ja-ja) y ha apostado muy fuerte por subir puntos a base de lanzar todos los días un Viva Cartagena en su papel de estadista internacional en el semestre europeo. Es la gran ventaja que tiene que otros tengan que someterse a esa cosa que llaman democracia y que lo lleva claro conmigo. Sarko y Angela (Merkel) le ayudarán con los forillos que necesita para sus fotos y sus planos medios para consumo interno en horario prime-time, siempre que se porte bien. De lo contrario, que se olvide también de los golpes de efecto de ese plan África para las islas Canarias que le han ayudado a montar en Bruselas para que parezca como que allí pinta algo”.

Quizás algún asesor le llevó un té, después de prostrarse al suelo y hacer el besamanos ese que dicta el protocolo con el susurro de un “sidi” que es parecido al “mi señor” de los siervos de la gleba. Justo lo que necesitaba para un nuevo increscendo. “Hay de verdad una conjunción planetaria porque también en la zona nunca lo hemos tenido mejor, con los vecinos que podrían crearnos probemas porque siempre lo hicieron en el tema del Sáhara, como es Argelia y Mauritania. Los argelinos, tan amigos del Polisario, han tenido que recular este verano ante la ofensiva mediática que montamos con la vuelta a mi Sáhara de ese chico, hijo del cabezotas del jeque Suilem, que de joven fue dirigente del Polisario pero que no ha resultado tan testarudo como su padre. Y en Mauritania, mejor que mejor, con todos los peones que tenemos allí desde que el golpe de estado puso al frente del garito a uno de los nuestros, que para eso el presidente Mohamed Uld Abdelaziz hizo aquí su carrera militar…Obama ya puede dejar de seguir tocando las narices con sus planes de revolución buenista y democratizadora para África, si quiere que Sarkozy y Merkel le echen una mano para resolver los avisperos de Afganistán e Irak. Es más, digo yo, por qué esperar más. Ha llegado el momento de que mi pueblo vea que tiene un rey que no sólo es hijo del astuto Hassán II, porque supera al padre. Mi padre, ya, ya... con toda su fama de Maquiavelo pero aceptó esa tontería del referéndum de la ONU que yo he rechazado de plano. Es más, hoy mismo empezamos. Ya está bien de tanta historia y tanta tontería de derecho internacional: aquí o uno es marroquí o no lo es; y no hay término medio, o se es patriota o traidor”.

Quizás se le ocurrió también que su propósito debía de ir acompañado de un golpe de efecto con el que convertir el triste aniversario en una fecha para la posteridad. Quizás, simplemente, a sus subordinados se les pusieron los pelos como escarpias por lo que se les venía encima si no ponían esmero en demostrar su patriotismo.

En cualquier caso, ya fuese por iniciativa del propio Mohamed o de sus subordinados, alguien mandó aviso a los españoles, de que pensaban dar una lección a Aminetu Haidar. Lo normal es que empezase por el gran amigo Moratinos, a juzgar por lo que dijeron los policías marroquíes que esperaron a Haidar en el aeropuerto de El Aiún para obligarla a subir a un avión rumbo a España.

En principio, en Madrid lo hubiesen tenido muy fácil para iniciar la tarea de zurcido. Todos los días estamos hartos de ver cómo a los inmigrantes que pillan sin papeles en las redadas que la policía monta en las salidas de metro de los barrios obreros, lo que les espera es la expulsión. Así que a Haidar la podían haber devuelto haciendo como que había llegado en patera. Ella misma se lo puso así de fácil cuando, todavía a bordo del avión que la llevó a Canarias, advirtió al piloto de que no iba adecuadamente documentada para franquear una frontera de la Unión Europea. No cabe duda de que el piloto se lo retransmitió a la superioridad como es normal, porque además la ley obliga a las compañías aéreas a pagar con multan y pasajes la devolución de los viajeros que no vayan con el visado o la documentación que requieren las autoridades de destino. Como dice el texto de la denuncia que Haidar ha puesto, y que el profesor Carlos Ruiz Miguel reproduce en un interesante culebrón no apto para insomnes, alguien contestó que no importaba, que en este caso la legislación es lo de menos.

No se puede entender que en Madrid no aprovechasen este resquicio si no fue porque alguien dijo en la reunión que se montó para estudiar la coyuntura: "alto ahí, que esto nos puede crear un problemazo con Mojamé. No os olvidéis que, aunque oficialmente digamos y hagamos como que no, España sigue siendo la potencia administradora del Sáhara, la que de verdad debería decidir quién entra y sale del Sáhara (dentro de un orden, claro) porque Marruecos allí es un okupa que dispone de la casa pero sin tener las escrituras. Lo malo es que allí se lo tomen como que hemos decidido ejercer y tomar decisiones y ya sabéis la poca flexibilidad que tienen los reyes alauitas. Cualquier cosa que les suene a afrenta, lo mínimo es que nos monten un nuevo Perejil como a Aznar. Eso con suerte, porque también nos puede caer una Marcha Verde a Ceuta y Melilla".

-“Quita, quita que sólo pensarlo me dan escalofríos”, debió de contestar otro de los expertos que abundan en el Ministerio ayudando a Moratinos a mimar las relaciones con el “hermano” marroquí. “Es que no hace falta hilar tan fino, que ya sabéis lo sensible que anda el niño con eso de hacerse con un hueco propio en la historia y, si se ha empeñado en demostrar que ha llegado la hora de la verdad con los saharauis, cualquiera le hace hacer un feo. Ya veremos cómo lo arreglamos, pero la saharaui que se quede aquí, que menuda diferencia entre volver al nido de moscas de donde viene a vivir como una reina opositando (de opositora, claro) en el primer mundo”.

-¿“No habrá problemas?”

- “Es una loca, pero lo tenemos todo controlado: al movimiento solidario (son todos socialistas y, además, como se muevan, les dejamos sin subvenciones y se quedan sin jugar a las ONG), al Polisario (que idem de idem porque ellos también viven de las ayudas), al PP de Rajoy al que tenemos atornillado con nuestra cooperación para librarle con Esperanza Aguirre y lo que queda del aznarismo; a los de la plataforma de artistas que son todos de los nuestros (los de la ceja les dicen no?), a la prensa de izquierdas que es la que leen los del movimiento solidario y hasta la Audiencia Nacional. Así que ¿de qué preocuparse? Es el momento de demostrarle a los marroquíes lo que les venimos diciendo, que en España la situación ha cambiado y ya nadie se acuerda de los saharauis gracias a nuestras sofisticadas políticas de borrado de la memoria histórica que no nos interesa."

Sí, alguien metió la pata con Aminetu Haidar. No, como diga ella porque no se hubiesen preocupado por conocerla, sino por culpa de la maldita soberbia que da a los que mandan la ilusión de tenerlo todo atado y bien atado. Gracias Aminetu, por hacer ese gran milagro que de vez en cuando escribe la historia cuando los complejos engranajes de la alta política descarrilan por el imprevisto y siempre sorprendente alcance del factor humano, el del pueblo llano.

P.D. De vuelta. Ya lo sé, debo una disculpa. O dos, las que sean menester. Dejé el blog abandonado y no dije nada. Imperdonable, aunque la mayoría seais amigos y ya sabéis por qué fue y que fui víctima de una de esas sobrecargas de alta tensión a las que aludí en el Círculo de Bellas Artes y que son la causa de que los periodistas que andamos enganchados con el culebrón de la política española en el Sáhara y Guinea, seamos especialmente vulnerables a los bajones de defensa que produce el exceso de estrés. Ayer, creyendo que Aminetu ya volvía a El Aiún, decidí que era el momento de hacer caso a Óscar y Javi (que son especialmente insistentes) y volver a las andadas . ¿Por qué ahora, justo cuando se “resuelve” el tema? Pues porque creo que, cuando vuelva a El Aiún, si lo consigue (que quiero pensar que sí), habrá que pagarle la factura (lo digo por Moratins) a Mohamed del “favor” que le hace librándole de un escandalazo. Me temo, que a partir de ese momento se hará lo posible para que los focos nunca vuelvan a encenderse y el Sáhara vuelva a ser pasto del olvido y la tergiversación. El el respeto al sacrificio con que la salud de Aminetu pagará el milagro de haber despertado las conciencias (como dice Saramago) merece que no lo consintamos. Aunque sea con un granito de arena.

3 comentarios:

Francisco O. Campillo dijo...

Es bueno que tu blog "reviva"... aunque sea en unas circunstancias tan lamentables como la terrible situación de Aminetu Haidar.

Un abrazo solidario

Óscar Elía dijo...

Por fin has vuelto, Ana. Gracias por ayudarnos a interpretar el Haidargate!

Luis dijo...

Ana, deberíamos prohibirte que te "ausentaras", ni siquiera con bajones de tensión.

Tus escritos son muy necesarios.

Un beso.
Por un Sáhara Libre,
Luis Portillo

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